Hyderabad, Telangana, India – Esta mañana, un rápido viaje por Hyderabad llevó a Su Santidad el Dalái Lama a Hitex Road, Madhapur, donde el Centro de Ética del Dalái Lama construirá su plataforma de Asia meridional. Esta será una unión cooperativa apoyada por el grupo de expertos del MIT y el gobierno del estado de Telangana.
Su Santidad y S.E.L. Narasimhan, gobernador de Telangana, descubrieron juntos la placa conmemorativa de la primera piedra y luego participaron en una plantación simbólica de árboles, que crecerán en el campus. A ellos se unieron en estas celebraciones el vice-primer ministro, Mohammad Mahmood Ali y el ministro de industria, MA&UD y IT Kalvankutla Taraka Rama Rao. El gobernador señaló que normalmente en las ceremonias hindúes se invoca la paz. Su Santidad estuvo de acuerdo y sugirió que la oración también necesita ser reforzada con acciones tales como entrenar la mente.
En el cercano Hitex Open Arena, el Ven Tenzin Priyadarshi, fundador del Centro para la Ética y los Valores Transformativos del Dalái Lama, saludó a los más de mil asistentes situados en la carpa y a otras quince mil personas que seguían el evento por internet. Pidió al vice-primer ministro, Mohammad Mahmood Ali, que diera la bienvenida oficial a Su Santidad y luego invitó a KT Rama Rao a presentarlo. Su Santidad comenzó su discurso en su manera habitual.
«Siempre comienzo saludando a la audiencia como hermanos y hermanas, porque me considero uno de los siete mil millones de seres humanos a los que considero como hermanos y hermanas. La forma en que nacemos y la forma en que morimos es la misma, ya seamos reyes, reinas, líderes espirituales o mendigos. Es por eso que es importante tener un sentimiento de unidad de la humanidad. Dondequiera que voy y con quienquiera que hablo, trato de promover esta idea en un esfuerzo por romper las barreras entre nosotros. Siempre que puedo, sonrío, lo que hace que los demás sonrían a su vez, haciéndonos felices a los dos.
»Aunque somos física, mental y emocionalmente iguales, hay diferencias entre nosotros. Yo soy tibetano, soy budista y soy el Dalái Lama, pero si hago hincapié en estas diferencias, esto me distingue y levanta barreras con otras personas. Lo que tenemos que hacer es prestar más atención a la forma en que somos iguales a los demás.
»La mayoría de los problemas a los que nos enfrentamos los creamos nosotros mismos al resaltar las diferencias secundarias de nacionalidad, fe religiosa, etcétera. Qué triste es que hoy en día la religión se esté convirtiendo en una causa de conflicto y violencia. No podemos permanecer impasibles cuando la gente está siendo asesinada en otras partes del mundo, tenemos que pensar cómo asegurar el bienestar de estas personas que sufren.
»Las diferencias de nacionalidad e ideología que eran importantes a principios del siglo XX parecen menos poderosas hoy en día. En Europa, tras haber luchado y haberse matado entre sí durante generaciones, después de la Segunda Guerra Mundial se creó la Unión Europea. Mi tutor de física von Weizsäcker me dijo que en su juventud, en la mente de los franceses, los alemanes eran los enemigos y viceversa. Pero dijo que todo esto cambió en la década de 1990. Reconociendo que nada bueno se obtiene de la destrucción que conlleva la guerra, la gente se ha dado cuenta de que es mejor vivir juntos. Es este espíritu de la Unión Europea el que admiro y el que necesitamos que se adopte en otras partes del mundo, en África, América Latina y Asia.
»A largo plazo, espero que haya una unión global y un mundo desmilitarizado. Mientras haya seres humanos implicados habrá problemas, pero tenemos que aprender a solventarlos a través del diálogo sin recurrir al uso de la fuerza. Esto implicará el desarrollo de principios morales puesto que nada se logrará sobre la base de la desconfianza y los celos».
Su Santidad observó que ahimsa, la no violencia, es una antigua tradición india que no se basa en el miedo, sino en la confianza y la compasión. Un ejemplo es la manera en la que prospera aquí la armonía religiosa. Las religiones originarias como el hinduismo, el jainismo, el budismo y el sikhismo prosperan, pero el crecimiento de religiones de otros lugares junto a ellas indica la verdadera tolerancia y respeto mutuo. El zoroastrismo vino de Persia. Apenas hay cien mil parsis en su comunidad de Bombay y, sin embargo, viven sin miedo: «Esto es la India —dijo Su Santidad—. De la misma manera, los judíos vinieron y crearon una comunidad en Cochin. También vinieron cristianos y musulmanes. Ahora, los musulmanes indios forman la segunda población musulmana más grande del mundo, incluso más grande que en Pakistán. Su Santidad señaló que, por supuesto, surgen problemas ocasionales, pero por otro lado la India es el único país del mundo en el que todas las principales religiones conviven en el respeto mutuo.
»Comparando las antiguas civilizaciones de Egipto, China y el Valle del Indo, Su Santidad sugirió que el Valle del Indo finalmente dio lugar al mayor número de pensadores y escuelas de pensamiento, incluido el budismo. La antigua psicología india, con su profunda comprensión del funcionamiento de la mente y las emociones, tiene mucho que enseñarnos hoy en día.
»Hace más de 30 años inicié debates con científicos modernos que han permitido a los budistas y contemplativos aprender más sobre el mundo físico, pero también han permitido a los científicos aprender sobre la mente y las emociones. Ahimsa, la no-violencia motivada por karuna o la compasión, es una manera de tratar con las emociones destructivas. Durante más de mil años los tibetanos hemos mantenido vivas estas tradiciones que florecieron en Nalanda. Los indios modernos de hoy en día tienen una oportunidad especial de combinar la educación moderna con los valores y los conocimientos de esta antigua herencia india. Muchos jóvenes ya lo están haciendo. Este Centro de Ética, con sus diversos programas y actividades, está contribuyendo en esta dirección. Agradezco a mi amigo aquí presente y al gobierno del estado por su apoyo.
»El Centro lleva el nombre del Dalái Lama, pero yo sólo soy un estudiante de la tradición Nalanda, un estudiante de Nagaryuna. Sin embargo, cuando visito otros países, a menudo le digo a la gente que soy un mensajero del antiguo conocimiento indio, un hijo de la India. Esto tiene su justificación porque mi mente está llena del pensamiento de Nalanda, mientras que mi cuerpo ha sido alimentado durante 58 años por arroz, dal y chapatis indios».
Respondiendo a las preguntas de la audiencia, Su Santidad explicó que, dado que la mayoría de la población mundial sigue viviendo en la pobreza, necesitamos buscar el desarrollo material. Sin embargo, esta búsqueda debe ir acompañada de un desarrollo interior o mental. Informó que no sólo los científicos han establecido que la naturaleza humana básica es compasiva, sino que han descubierto que la ira y el miedo constantes socavan nuestro sistema inmunológico, mientras que el cultivo de una mente compasiva lo fortalece. Manifestó que cuando un número importante de personas no tiene ningún interés en la religión, los intentos de promover los valores universales tienen que adoptar un enfoque secular.
Uno de los asistentes, que señaló el papel de la educación en el fomento de los valores internos, preguntó sobre el papel de los padres. Su Santidad le dijo que la ciencia ha demostrado los efectos positivos del simple contacto físico entre madre e hijo, pero lo que es asimismo importante es que los padres muestren afecto a sus hijos.
Cuando se le preguntó cómo prepararse para la muerte, Su Santidad respondió que hasta cierto punto depende de las creencias que se tengan. Dijo que si se cree en un Dios bondadoso, pensar en él, en su amor y compasión puede ser de ayuda en el momento de la muerte. Para un budista sería útil tener en mente el mensaje principal de Buda, la compasión y la falta de existencia independiente de las cosas. Añadió que para prepararse para cuando llegue la muerte, también hay maneras de visualizar el proceso de la muerte con sus ocho etapas de disolución, terminando finalmente con la mente de luz clara.
«La mejor preparación para la muerte —continuó diciendo Su Santidad— consiste en tu modo de comportarte en vida, evitando hacer daño a los demás y ayudándoles en todo lo que puedas. Si así lo haces, podrás morir sin arrepentimientos. Por lo tanto el hecho de tener una muerte tranquila depende mucho de cómo has vivido tu vida».
Otra joven quería saber cuál es la forma más efectiva de entrenar la mente, cultivando la concentración o la meditación analítica. Su Santidad fue directo elogiando el análisis. Informó de la forma en que él mismo lo hace. Analiza su cuerpo, mente y sentimientos. Piensa en la transitoriedad y el cambio momentáneo. Evalúa cómo el pasado, el presente y el futuro cambian constantemente. El pasado y el futuro sólo existen en relación con el presente, pero el presente es aparentemente imposible de asir. Mencionó que reflexiona sobre su cuerpo y que está formado por partes —cabeza, manos, pies y tronco— y se pregunta si alguna de esas partes por sí sola es su cuerpo.
Finalmente, el moderador le pidió a Su Santidad que le dijera cómo se las arregla para verse tan joven. Su Santidad respondió: «Ese es mi secreto», pero luego explicó que sistemáticamente duerme durante nueve horas por la noche. Cuando se despierta se dedica 4 horas a meditar, lo que contribuye a su paz interior. El sueño y la meditación, sugirió, contribuyen a la paz interior y a la fortaleza interior. «Si quieres, tú también puedes hacerlo».
El Ven Tenzin Priyadarshi clausuró la sesión con agradecimientos. En primer lugar, agradeció a Su Santidad su presencia y, a continuación, a las numerosas personas que han hecho de esta sesión inaugural un éxito: los miembros de su equipo y, en particular, el gobierno de Telangana.
Su Santidad asistió a un suntuoso almuerzo oficial como invitado del vice primer ministro, tras el cual se dirigió al aeropuerto internacional Rajiv Gandhi para volar a Amritsar, desde donde se dirigirá a Dharamsala mañana por la mañana.