Thekchen Chöling, Dharamsala, HP, India - «Hoy me gustaría saludarlos a todos —con estas palabras, Su Santidad el Dalái Lama comenzó el tercer día de su explicación de la Esencia del Buen Discurso de Tsongkhapa, principalmente para los budistas taiwaneses—. La oración que encontramos al final del Sutra del Corazón dice: «Que pueda internarme en las prácticas de un bodisatva». Tal vez esto debería ser más una determinación que un simple deseo, «Me internaré en las prácticas de un bodisatva».
«Por muy profunda que sea la experiencia de vacuidad que tengamos, no nos permitirá superar las obstrucciones cognitivas. Para ello también necesitamos la bodichita. El «Ingreso al Camino Medio» rinde homenaje a la compasión, porque la compasión al principio es la semilla del logro de la Budeidad. En el medio la compasión es el factor que aumenta la bodichita y cuando alcanzas la Budeidad, te incita a servir a los demás.
»Si combinamos la bodichita con la sabiduría que comprende la vacuidad, superaremos todas las contaminaciones, las obtrucciones cognitivas y las emociones aflictivas. Al ver el sufrimiento de los seres sensibles, seremos incapaces de soportarlo y trabajaremos para ayudarlos.
»Reanudaremos la lectura del texto. Hacia el final se examinan las afirmaciones de los proponentes de la escuela Autónoma del Camino Medio y luego las afirmaciones de los Consecuencialistas. En su Elogio al Buda por Enseñar el Surgimiento Dependiente, Lama Tsongkhapa afirma que con el razonamiento del surgimiento dependiente no nos apoyamos en ninguno de los puntos de vista extremos. El surgimiento dependiente es la enseñanza más significativa del Buda».
Su Santidad aludió a cuatro falacias lógicas que, en su Ingreso al Camino del Medio, Chandrakirti explica que se producirían si los fenómenos tuvieran una existencia objetiva: la absorción meditativa de un ser noble centrada en la vacuidad sería la destructora de los fenómenos; sería erróneo enseñar que las cosas carecen de generación última; la existencia convencional de las cosas sería capaz de soportar el análisis último de la naturaleza final, y sería insostenible afirmar que las cosas están vacías en sí mismas.
Su Santidad reveló que reflexiona sobre estos cuatro puntos todos los días en su meditación. «Ya sea que pensemos en el yo de las personas, la conciencia o lo que sea —continuó—, todo parece tener algún tipo de existencia objetiva e independiente. Cuando el negandum aparece en nuestra mente y tratamos de refutarlo, estamos llevando a cabo un análisis de cómo existen los fenómenos».
1) La mente de un ser noble se absorbe en la vacuidad después de su propio análisis sobre si los fenómenos tienen alguna característica intrínseca. Si tuvieran tales características, la mente del noble las encontraría. Si tuvieran alguna existencia intrínseca, la meditación equilibrada de un noble centrada en la vacuidad sería una destructora de esa entidad, lo cual es lógicamente absurdo.
Si su fundamento fueran sus propias características,
al refutar estas, las entidades quedarían destruidas.
La causa de su destrucción devendría una vacuidad,
y eso es absurdo, luego las entidades no existen. 6.34
2) Si los fenómenos tuvieran una identidad intrínseca, sin dependencia de otros factores, la realidad convencional soportaría el análisis último, lo cual es lógicamente absurdo. Si pudiéramos señalar una identidad, esta tendría que soportar el análisis final. Sin embargo, el Yogui no encuentra nada, ni esto ni aquello, para señalar. Otras escuelas dicen que un objeto de la cognición válida debe ser algo objetivo ahí fuera, pero, en realidad, una cognición válida es una cognición cuyo objeto existe tal como es percibido por ella.
Las escuelas de pensamiento inferiores dicen que debe haber una cognición válida con características autodefinidas. Si ese fuera el caso, ese objeto resistiría el análisis final. De hecho, no hay ningún objeto que tenga una existencia intrínseca, todos son designados de manera convencional.
Cuando examinamos bien estas entidades,
aparte de la identidad real de su ser en sí,
no se encuentra nada de este lado, luego la verdad
convencional mundana no debe examinarse. 6.35
Si los fenómenos tuvieran un núcleo esencial en sí mismas, ello conduciría a la falacia lógica de que la realidad convencional resistiría el análisis exhaustivo.
3) Si entidades con su propia esencia surgieran de sus causas, no se podría negar la producción a nivel último.
4) La enseñanza de Buda de que los fenómenos están vacíos de naturaleza propia no sería verdad. Cuando decimos que algo está vacío, se dice que lo que estamos analizando está vacío de existencia intrínseca o naturaleza propia.
Al considerar la talidad, ningún razonamiento
demuestra la generación de sí ni de otro.
Tal razonamiento no procede ni de modo nominal,
¿de qué es, pues, vuestra generación? 6.36
Los reflejos y otras entidades vacías
que dependen de un cúmulo no dejan de ser consabidas. 6.37
«Los fenómenos no tienen existencia propia —aclaró Su Santidad—, son designados. Surgen dependiendo de las condiciones. Cuando se habla de la vacuidad de la forma, un objeto físico, la forma es analizada y lo que se encuentra es que está vacía de existencia intrínseca.
»Estas cuatro falacias lógicas o absurdas se mencionan en la Esencia del Buen Discurso de Ye Rinpoché y en la sección de visión superior del Gran tratado sobre las etapas del camino.
»La Esencia del Buen Discurso dice:
Esta (negación excepcional) se realiza en el »Ingreso al Camino Medio" (Madhyamakavatara) por tres razonamientos dados en los versos del texto raíz y uno dado en el comentario.
El primero de ellos (se llama) «la consecuencia de que la absorción meditativa destruiría los fenómenos». (366)
(El segundo de los cuatro razonamientos excepcionales se llama) la «consecuencia de que la realidad convencional podría soportar el análisis exhaustivo». (367)
(El tercero de los cuatro razonamientos excepcionales se llama) «la consecuencia de la no negación de la generación a nivel último». (373)
(El cuarto de los cuatro razonamientos excepcionales se llama la consecuencia de) «la equivocación de la declaración (escritural) de que los fenómenos están vacías de su propia realidad intrínseca». (374)
«Los fenómenos son simplemente designados por nuestro pensamiento, lenguaje y conceptos. La vacuidad no hace a los fenómenos vacíos como tales: los fenómenos son vacíos. Las cosas están vacías de sí mismas. No están vacías de otra cosa. Este es uno de los principales planteamientos que Ye Rinpoché hace en este libro.
«El Ingreso al Camino Medio afirma que cuando los bodisatvas llegan a la primera tierra, eclipsan a los shravakas y a los pratyekabuddhas por su linaje. Cuando llegan a la séptima tierra, los eclipsan por su inteligencia. Chandrakirti también afirma esto en su autocomentario y al hacerlo afirma que los seres nobles entre los shravakas y los pratyekabuddhas también tienen la realización directa de la vacuidad.
»La realización de la ausencia de entidad burda de las personas puede ayudar a suprimir cierto grado de aferramiento a un yo verdaderamente existente de las personas, pero, como las prácticas no budistas, no eliminará todas las obstrucciones.
»Para comprender la ausencia de entidad de las personas a fondo, es necesario comprender la ausencia de entidad de los fenómenos. Chandrakirti cita un verso de la Preciosa Guirnalda de Nagaryuna:
»Mientras exista la noción de «los agregados»,
seguirá existiendo la noción de un «yo»;
al existir la noción de un «yo», hay acciones
y de estas, a su vez, provienen los renacimientos. (35)
»Una vez tuve una experiencia al leer la Clarificación del Pensamiento de Tsongkhapa —su comentario sobre el Ingreso al Camino Medio— y sentí como si me hubiera alcanzado un rayo. Parecía que el yo no tenía una verdadera existencia, pero cuando reflexioné sobre estas líneas de la Guirnalda Preciosa me di cuenta de que no es suficiente con sentir que el yo no existe. Hemos de ser capaces de ver que el yo carece de existencia verdadera y que sólo es designado. Mientras no seamos capaces de superar la cosificación de los agregados, no seremos capaces de comprender plenamente la ausencia de entidad de la persona. Esta estrofa de la Guirnalda preciosa es importante.
»Reflexiono sobre estas cuatro reducciones al absurdido mencionadas en el Ingreso al Camino Medio y en la Esencia del Buen Discurso todos los días. Los tibetanos somos propensos a recitar manis, pero haríamos bien en reflexionar sobre estos cuatro puntos diariamente también.
«Tenemos que pensar en la vacuidad, pero también tenemos que cultivar la bodichita. El 'Bodhicharyavatara' de Shantideva es el mejor texto para ayudarnos a derrotar nuestras actitudes egoístas. Lo dice muy claramente:
»8/129 Cualquier alegría que haya en este mundo viene de desear que los demás sean felices, y cualquier sufrimiento que haya en este mundo proviene de desear mi propia felicidad.
»8/130 ¿Hace falta decir más? Los infantiles se ocupan de sí mismos, los Munis obran por el bien ajeno: mirad la diferencia entre ellos.
»8/131 Si no intercambio mi felicidad por el sufrimiento de los demás, no sólo no alcanzaré la budeidad, tampoco en el samsara tendré felicidad.
»No queremos sufrir, queremos ser felices, pero creamos todo tipo de sufrimientos y problemas en el mundo debido al egocentrismo. Si nos dejamos engañar por el egocentrismo, no alcanzaremos la Budeidad.
»7/30 Montando sobre el caballo de la bodichita, que elimina todo dolor y todo abatimiento, ¿qué persona inteligente puede sentirse descorazonada yendo de felicidad en felicidad?
»Medito todos los días sobre la vacuidad y la bodichita. Les animo a que lo hagan ustedes también. Estos dos aspectos constituyen nuestra práctica principal. Estudienlos, reflexionen y mediten sobre ellos».
Su Santidad reveló que había pensado completar la serie actual de enseñanzas dirigiendo una breve ceremonia para cultivar la bodichita. Recomendó que los discípulos se imaginen al Buda Shakyamuni en el espacio frente a ellos, acompañado por los ocho discípulos cercanos, los Budas y bodisatvas y los grandes maestros indios como Nagaryuna.
En su Elogio de la Bodichita, Khunu Lama Rinpoché escribió que para tener una mente relajada, debes practicar la bodichita. Beneficiar a los demás y lograr un renacimiento superior en tu próxima vida son resultados que surgen del cultivo de la bodichita. La bodichita es el único factor que trae beneficios para uno mismo y para los demás.
Su Santidad recitó los versos esenciales de la ceremonia e invitó a los discípulos a meditar sobre la bodichita.
Voy por refugio a las tres joyas.
Confieso todas mis faltas.
Me regocijo en la virtud de los seres.
Sostendré la iluminación de Buda en mi mente.
Hacia el Buda, Dharma y Shanga,
voy por refugio hasta la iluminación.
Para lograr el bien propio y ajeno,
generaré bodichita.
Tras generar la suprema bodichita,
tomo a todos los seres como mis invitados.
Que, entregándome a las mejores prácticas de los bodisatvas,
pueda iluminarme para beneficiar a los seres.
Para completar la ceremonia, repitió algunos versos de celebración de Bodhicharyavatara.
Hoy mi vida ha dado fruto,
he obtenido esta existencia humana para bien.
Hoy he nacido en la familia de los Budas
y soy desde ahora uno de sus herederos. 3/26
Igual que un ciego que encuentra una joya en una pila de basura,
por una casualidad semejante,
ha nacido en mí esta bodichita. 3/28
Mencionó que durante las prácticas tántricas se acostumbra a emplear medios para alejar a los seres potencialmente dañinos, pero, en el contexto de la bodichita, no hay nadie a quien se pueda considerar un enemigo.
Al responder a las preguntas del público, Su Santidad aludió a la ausencia de entidad de las personas y de los fenómenos. Con respecto al «sufrimiento automático», explicó que se refiere al sufrimiento innato. Hemos tenido ideas equivocadas sobre la existencia verdadera durante un tiempo sin principio, como resultado de lo cual el sufrimiento nos acompaña a lo largo de la existencia cíclica.
En respuesta a una pregunta sobre la felicidad perfecta, citó unos versos del Ingreso al Camino Medio.
Así, mediante la claridad de la luz de la inteligencia, ve,
tan claro como un mirobálamo en la palma de la mano,
que los tres mundos son innacidos de forma primordial
y, en virtud de la realidad convencional, va a la cesación. 6.224
Su mente está siempre comprendida en la cesación,
mas genera piedad por los errantes desamparados.
En adelante, todos los nacidos de la palabra del Buda
y los Budas medianos son vencidos por su intelecto. 6.225
Con las blancas alas del ser en sí y lo convencional extendidas,
este rey de los ánades alza el vuelo al frente de los patos
que son los seres y, empujado por el viento de la virtud, va
al más allá supremo del océano de cualidades de los Victoriosos. 6.226
Cuando se le preguntó sobre el empleo de ratones y demás en experimentos científicos, Su Santidad sugirió que si se está trabajando para beneficiar a los seres humanos y salvar vidas, y no hay un intento deliberado de causar sufrimiento, puede ser aceptable. Sugirió que la técnica de entrenamiento de la mente de imaginar asumir los sufrimientos de los demás no suele marcar una diferencia en la práctica. Como dijo, hay innumerables Budas y bodisatvas en todo el espacio, pero no tienen un efecto directo en los sufrimientos de los seres.
Señaló que si, al analizar los fenómenos a través del razonamiento séptuple o quíntuple, llegamos a la conclusión de que no se puede encontrar una entidad sólida y separada, podemos llegar a comprender la ausencia de entidad. Del mismo modo, como resultado de la meditación sobre la vacuidad podemos ser capaces de ver que las personas y los fenómenos son como ilusiones. La esuela del Camino Medio afirma que los fenómenos están desprovistos de existencia verdadera desde el momento en que aparecen.
«He repasado los puntos esenciales de este libro —declaró Su Santidad al final de la sesión—. En lo que respecta a la pandemia, tal vez termine el año que viene y pueda enseñar aquí en el Tsuglagkhang y en Bodhgaya una vez más. Eso es algo que estoy decidido a hacer en cuanto pueda, pero mientras tanto todos debemos ser cuidadosos.
»El Buda nos dijo que somos nuestros propios maestros y que el tipo de vida que llevamos está en nuestras manos. Lo más importante es practicar el dharma, lo que significa cultivar la bodichita y la comprensión de la vacuidad. Por supuesto, también me dedico al yoga de la deidad, pero es mi práctica de la bodichita y la vacuidad lo que realmente ha provocado una transformación en mí. Los libros cruciales sobre estos temas son la Guía del Modo de Vida del Bodisatva, la Sabiduría Fundamental del Camino Medio y el Ingreso al Camino Medio.
»Siento que he hecho algunos progresos en la transformación de mi mente y ustedes pueden hacer lo mismo. Recuerden, los Budas no lavan con agua las acciones insalubres, ni eliminan los sufrimientos de los seres con sus manos. Tampoco transfieren sus propias realizaciones a otros. Es mediante la enseñanza del ser en sí que liberan a los seres.
»Si estudian, reflexionan y meditan en las enseñanzas, la transformación estará al alcance de su mano».