Ha circulado un vídeo que muestra un encuentro reciente en el que un niño preguntó a Su Santidad el Dalái Lama si podía darle un abrazo. Su Santidad desea pedir disculpas al niño y a su familia, así como a sus muchos amigos de todo el mundo, por el daño que sus palabras hayan podido causar.
Su Santidad suele bromear con la gente que conoce de forma inocente y juguetona, en público y ante las cámaras. Lamenta el incidente.